Hay un siempre que cuando ama, no sabe de regreso...

Supe introducirme
en tus ojos
como si fueran
un mar profundo.
Supe acunarme
en tus sentimientos
y  besar así tu cielo sereno.
Supe imaginar
en tu mirada lejana,
los mil caminos
que bifurca el alma.
Supe ser yo en ti,
recorriendo tu ser
y tú en mi
renaciendo en el querer.
Supimos abrazarnos
corazón a corazón
y multiplicarnos sin medida
en el amor.
Supiste tú, escalar mi sentir,
supe yo, vivirte hasta morir
en un deleite profundo,
hasta quedar extasiados
de pasión.
Supimos, sabemos
y sabremos amarnos
en todos los tiempos
que el amor para nosotros
ha conjugado.
Dejemos que sigan sabiendo
nuestros intensos sentimientos,
más allá de la razón,
rozando a la sabia intuición.
Dejemos que el amor
nos señale
que hay un siempre, que cuando  ama
no sabe de  regreso...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman