Alma, ahora necesito yo recoger de ti el amor...

A veces no sabes a quien pedir
ese apoyo interior
que necesitas, para no sucumbir
en una angustia infinita,
son momentos tormentosos
que arrasan con la calma,
llenan de paisajes tristes
al alma,
transforman en
viejos despojos
al corazón...
Yo me dirijo a ti, imaginación
que a veces pareces
divina,
yo me dirijo a ti, fantasía
e ilusión en versos,
de todos los días,
por qué no me ayudan
a mantenerme serena,
por qué no acuden
a mi espíritu, perdido
en la inmensidad de la pena...
Mi sensibilidad os clama,
a ti especialmente,
alma dispuesta a dar amor,
soy una frágil rosa
en la lluvia nocturna tirada,
que pide volver a su tallo,
tal vez un injerto de valor
le devuelva la vida que
le falta,
para salvarle a mi rosa
el daño en el corazón...
Tanta fragilidad manifiesta,
que desborda y desencadena
eslabones que sobrepasan
la capacidad de resistencia...
Dime alma por qué eres
tan delicada y tan débil,
por qué me dejas sola
ante la adversidad,
sin poder afrontar
la vida y su continuo trajinar...
Alma, ahora necesito yo
recoger de ti el amor...
me lo darás en tu poesía, quizás...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman