viernes, 11 de febrero de 2011

Cuando me daña la vida...



Hoy no quise mirarme al espejo,
sabía que no me encontraría,
sabía que una lágrima
brotaría de mi reflejo...
Hoy no quise buscarme
en ese vidrio sinistro
porque cuando no nos
encontramos en él,
solemos odiarlo.
Hoy no quise perderme
entre imágenes extrañas,
no quise no entender
donde empezaba la luz
y donde termina la esperanza...
Hoy lo rechacé de lleno,
porque quería gritarle
o quería en mil pedazos romperlo,
sensaciones molestas, dolientes
que no quería verlas
dibujadas en el espejo...
Cuando me siento
sombra de mi sombra,
y un murmullo me rezonga,
me reta, me apabulla,
huyo de su nítida figura,
no quiero encontrarme
en penumbras y
llorando como una débil criatura...
Hoy no quise mirarme al espejo,
lo eché de mi vista,
doble mi cuerpo ante él,
seguí de largo
con un dejo de amargura,
con una enorme pesadumbre,
porque no aceptaba mi propia fuga...
Hoy no quise mirarme al espejo,
detractor de mis días,
firme panorama de mi realidad
a la que le escapo
cuando me daña la vida...

Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman


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