Qué haré con esta loca mía
que rompió todos los mandatos,
que enterró todos los preceptos,
que abandonó un camino trazado,
que dejó detrás de sí,
varias culpas llorando...
Qué haré con esta loca mía
que venció las amenazas
de la herencia,
qué se prometió a sí misma
ser noble con su conciencia
qué evitó ablandarse ante
la injusticia,
que lloró escondida
cuando la lucha la sacudía...
Qué haré con esta loca mía
que nunca simuló simpatía,
que se descarnó a gritos
por defender sus ideales,
qué haré dime, con
esta rebelde incurable
que no entiende de razas,
religiones ni distintas
sociedades...
Qué haré con esta loca mía
que no obedeció,
que no se sometió,
que no creyó en falsas verdades,
que quedó escalando
la montaña de las adversidades,
que se llevó las críticas más grandes
por ser auténtica y distinta,
por pensar por sí misma...
Ahora, después de tanta fatigosa labor
quedo yo, conmigo
quedo yo con lo que me quedó
luego del cataclismo por perseguir
a mi propio sol, a mi lucero de amor...
Qué haré con esta loca mía,
más que darle todavía, la valentía
que le falta, para seguir así locamente
leal a su corazón...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
que rompió todos los mandatos,
que enterró todos los preceptos,
que abandonó un camino trazado,
que dejó detrás de sí,
varias culpas llorando...
Qué haré con esta loca mía
que venció las amenazas
de la herencia,
qué se prometió a sí misma
ser noble con su conciencia
qué evitó ablandarse ante
la injusticia,
que lloró escondida
cuando la lucha la sacudía...
Qué haré con esta loca mía
que nunca simuló simpatía,
que se descarnó a gritos
por defender sus ideales,
qué haré dime, con
esta rebelde incurable
que no entiende de razas,
religiones ni distintas
sociedades...
Qué haré con esta loca mía
que no obedeció,
que no se sometió,
que no creyó en falsas verdades,
que quedó escalando
la montaña de las adversidades,
que se llevó las críticas más grandes
por ser auténtica y distinta,
por pensar por sí misma...
Ahora, después de tanta fatigosa labor
quedo yo, conmigo
quedo yo con lo que me quedó
luego del cataclismo por perseguir
a mi propio sol, a mi lucero de amor...
Qué haré con esta loca mía,
más que darle todavía, la valentía
que le falta, para seguir así locamente
leal a su corazón...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
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