Tendrás que subir muy alto...

Tendrás que subir muy alto,
para encontrar mi soledad,
no es accesible a tus manos
ni a tu alma,
la tengo bien alejada
allá en una colina de plata...
Con nadie la comparto,
es mía, como lo es mi
nostalgia.
El verbo la hizo esquiva,
la transformó en
una criatura arisca,
La podrás identificar
más allá de mi sonrisa,
por la neblina del alma
en donde se esconde
de tanto sufrir la calma...
Tendrás que subir muy alto...
compartirla será temerario,
pero si logras llegar
y no te da mareos,
si resistes las alturas
entonces te diré,
que contigo la compartiré
más allá de mi ser y mi locura...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman