Cuando alguien se mete
muy dentro,
cuando alguien te atraviesa
el corazón,
...y te llena de puros sentimientos,
no podrás desprenderte
muy fácil de su fuerza...
Cuando ese alguien te comprende,
y cuando lo necesitas
te aguarda con tibieza,
como se puede ignorar,
si se transforma en aquel ser
que te protege cuando sientes
temor, hambre de amor, o sed...
Cuando se clavó un afecto
dentro de tu alma,
cuando al mirar a esa persona
te sientes aliviada,
como no rendirle tributo
a su actitud abnegada,
porque piensa en ti,
comprende tu dolor,
recorre tus palabras,
y se abre para tu espíritu,
al amor...
Afortunados los que encuentran
a esos seres que te quieren,
sin esperar respuestas...
Afortunados los que saben
donde acudir cuando
tiene las manos vacías de caricias...
Afortunados los que conocen
la dicha de ser escuchados,
la profunda alegría de ser amados,
la dulce sonrisa del que
te aguarda siempre,
sin molestarlo,
y de buena gana,
te está paciente
esperando...
Afortunados los que saben
donde acudir
con el corazón dolorido,
con los ojos lagrimeando,
y en el alma,
un manchón que no sale
hasta que con el amor se lava...
Autoría: Raquel Norma Smerkin RoitmanVer más
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