miércoles, 13 de julio de 2011

No es, ni será tarde...

No es, ni será tarde
para entrar en tu corazón,
y confesarte
que siempre te amé, porque
El amor mismo es el tiempo.
Desde que supe de tu
existencia.
Recuerdo que me hablaba
 la luz del amor
con su sapiencia,
y yo me entregaba,
pero a medias.
No es, ni será tarde
para expresarme
desde el más íntimo sentimiento,
y decirte lo mucho que te quiero.
Tarde es un término
que tiene ese aire de indefinido,
tarde para qué, si el tiempo
se inventa mientras vivimos.
Cualquier momento es el
instante escogido
para que nuestra alma,
se de en su integridad,
cualquier momento
es oportuno mientras
sientas por dentro
la seguridad que
todo tiempo está dado
para sentir, para amar.
No es, ni será tarde...
poder confesarte
lo que siento,
el sentimiento no tiene
ni reloj, ni segundero,
el sentimiento es
la madre de todos los tiempos.
No rige nuestro corazón
ningún horario determinado,
No es, ni será tarde
lo que siempre fue,
lo que ocupó desde siempre
ese espacio abstracto
de ser amor, en el tiempo...
Tarde o temprano,
da igual su significado,
son adverbios de modo,
pero para el corazón
no importa su ubicación
en el lenguaje clásico...
Ninguno de los dos
cambian la esencia
del contenido del amor...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman

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