tanto desborde
en las venas,
tanto temblor
y el descontrol
del corazón
que clama
no perder al amor...
Tanto sentir
como en carne viva,
como si no hubiera
como cubrir
la fragilidad del alma,
como si muriera de a poco
mi ser entre,
la agonía por querer,
y la calma de poder...
Tantos rincones
indefensos, desnudos,
desprendiéndose
de una raíz débil,
sin los arrumacos
de los nacimientos deseados...
Tanta vulnerabilidad
para qué?
si sólo me traen quejas
de penas viejas,
de indomables emociones
que no encuentran
los momentos para
expresar sus sentimientos...
Tanta sensibilidad extenuada,
que no hace bien...
tanto que falta de fiemeza
por aprender...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
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