Ese punto...

Mira, no sabía
como es que llegué
a ese punto,
tan íntimo,
tan tuyo,
en donde
tu alma vibra
de tanto amor...
Mira, no se
como pude
tocar esa zona
en donde ni
tú sabes,
donde alojas
tu mayor esplendor.
Mira, no me propuse
indagar tus arterias,
pero tu sangre
y tu savia he probado,
sin darme cuenta.
Mira, ese punto
el que me tienes
como marcado,
es un inmenso mundo
de luz y de amor.
Ese punto tan pequeñito,
pero tan sensible
que se disuelve
mi corazón.
Mira, nunca pude
sorprenderme tanto
cuando encontré
que en un
diminuto espacio
se encierre tanto.
Ese punto me fascina,
hace que mi ser
se anime a comprenderte,
hasta el lugar
más íntimo que tienes,
ese que no compartes
ni siquiera contigo...
Mira si se puede negar
uno a amarte,
luego de haber llegado
a tocar con mi alma
ese punto...
ese punto tan tuyo,
que ahora compartimos...
Autoria: Raquel Norma Smerkin Roitman