falta pocos instantes
para dejarme llevar
y transformarme así
en un eterno divagar...
Seré mi propio viaje,
con maletas etéreas
y sin despedidas,
sin egoístas miserias...
Ya parto...
no creo volver
porque no voy
en verdad
a ningún lado,
es un viaje interno,
sin escalas, sin transporte
más que mi libertad...
Un viaje sin retorno quizás,
porque haré de mi vida
un constante
descubrirme por dentro...
un viaje hacia mí misma
que todo el tiempo
que me resta de vida
me llevará...
Ya parto...
no demoraré a mi ausencia
que reclama
que así lo haga,
viaje que no necesita pañuelos,
que no requiere de lágrimas
ni adioses gastados de tiempo...
Ya parto llevada
por una búsqueda ingrata
pero tan humana,
que me animo a ponerle garras.
No cesaré hasta encontrar
la fuente misma del ser,
la esencia del amor,
para ello me sumergiré
en la intuición, en la razón
y pondré en juego
mi emoción...
Será el viaje más arriesgado
que en la vida se dio,
seré mi propio náufrago,
venceré mis propios peligros,
esos de verme ante Dios...
Ya parto,
no me demoraré,
Seré mi propio viaje
mi propia búsqueda, mis ansias,
seré yo dentro de mí misma
hasta encontrarme allí,
con el alma desnuda
y esperándome...
Autoría Raquel Norma Smerkin Roitman.
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