Esa voz...

Esa voz buscaba un cuerpo,
unos ojos, unos cabellos,
unas manos, un te quiero...
Esa voz buscaba un cuerpo
completamente entero,
sino quedaría sumida
en el letargo eterno...
Una vez conseguida
una morada fija
y no ser huésped,
empezó a buscar
un corazón, un alma,
y un espíritu para
que le diera a su ser
la totalidad añorada...
Esa voz, ansiosa
quería hallar un querer
para no quedar
callada y poder expresar
su necesidad de amar, de ser...
Esa voz solitaria,
de tener nada más
que sus propias notas
celosamente guardadas.
pasó a ser canto
de la naturaleza
durante todas las mañanas...
Voz de la vida misma,
ella quería seguir entonándose,
no llegar a la despedida.
Voz que llegó a incorporar
en su bello cantar
las primaveras más hermosas,
y así poder vivir con felicidad...
Esa voz buscó...
esa voz llegó...
esa voz quiso ser...
esa voz se hizo vida,
se materializó su energía,
esa voz así fue que amó...

Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman