El amor aguanta
a sus espaldas,
los escombros,
de convalecientes heridas,
las borrascas,
de todas las vidas,
las grandes tormentas,
las más tristes lágrimas...
El amor está hecho
de la misma grandeza
con que se compone
un alma enamorada...
Es capaz de hacerle frente
con el pecho erguido,
a cualquier inminente bala...
El amor no se detiene
ante la más terrible situación,
es capaz de vivir
hasta los últimos instantes
entre la guerra y la pasión...
El amor se arrastra
en el campo de batalla,
quiere subsistir a las granadas,
y ante el caos,
toma con firmeza el mando,
y si es necesario
con dignidad y de pie,
muere en la misma misión...
El amor siempre seguirá,
no se detendrán los enamorados
a seguir amando,
entre huracanes, entre tornados,
mientras el mundo va
con dificultad, respirando,
es el amor que con firmeza y sin dudar,
siempre seguirá luchando...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
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