jueves, 24 de marzo de 2011

Sol hambriento de amor...

Muere el sol...
para darle paso a la noche,
es una muerte aparente,
porque renace
al día siguiente...
Mueres tu también
en tu renacer...
como muere el sol
pero de amor,
te vas desvaneciendo
en suspiros lentos,
te alejas de la luz,
en penumbras se queda
tu enamorado corazón...
Pareces casi muerto
pero luego resucitas
en acelerados latidos,
y luego vuelves a
hundirte en el deseo,
sin sol, sin luz, sin vida, pero
con la sangre de tus venas
que gritan un,
te quiero...
Todo muere, nada muere,
eternos y contingentes del
universo...
somos grandes sobrevivientes
de nuestras emociones
 nos perdemos en un sueño
de sol hambriento de amor,
nos despertamos brillando
como un radiante amanecer
con todos sus rayos...

Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman




No hay comentarios:

Publicar un comentario