Elígeme...

Date prisa,
están todas los rosas
entreabiertas,
y los pimpollos
esperan ser regados.
Date prisa,
que ante tanta bella
magnificencia,
yo, flor silvestre
te estoy esperando.
No se si por ser flor
nada más,
valorarás mi belleza,
no se si te detendrás
a urgar mi alma
de amapola travesa.
Florece incesantemente
este jardín enamorado,
y tu por el paseando,
entro y salgo de tu vida,
para lucir mi silvestre esencia,
si quieres deténte a verme,
bien de cerca, a ver si
encuentras en mí,
eso que buscas,
aunque no huela como elllas.
Elígeme, arriésgate a sentir
mi aroma a mar y tierra,
vulgares fragancias
que aunque no estén
a la altura de las más
encumbradas rosas,
encontrarás mi fiel frescura
de mariposa.
Elígeme entre todas,
hónrame con tu presencia,
sentirá la flor de mi alma
la felicidad de pertenecerte
como flor viva...
Elígeme así como me vez,
desprendiéndo pétalos
al viento,
sintiendo la necesidad
de que me ames
como cenicienta
mirando al cielo...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
5.05.2011