Te siento muy intenso,
me emociono, y busco
llamarte de algún modo,
no puedes quedar
sin ser nombrado,
sentimiento amado...
Eres tan potente
que mereces
ser designado...
Das vueltas en
mi mente,
mi corazón te
retiene,
no te escaparás,
porque ya te has
manifestado aún
sin nombre determinado...
pero sí por el alma
insinuado...
Tu raíz larga llamas
porque quiere perdurar,
no morirás en el idioma,
peleas por subsistir
en esta búsqueda
porque quieres vivir en mi...
Sentimiento huérfano
de abecedario,
ya brotará la palabra
que fije tu existencia.
Encuentro sublime
de la palabra
con el sentimiento...
Revelación de
un te quiero,
justo a tiempo.
Bocabulario salvaje,
se entremezcla,
se esconde su esencia,
a veces no se encuentra
la palabra apropiada,
esa que traduce
en el léxico, toda la
potencia, del alma
enamorada...
Encuentro de la palabra
con el sentimiento,
es como completar
los tiempos del querer.
Llenar de contenido
con el verbo,
nuestros amores
y desamores,
es un encuentro
que embellece al sentimiento
es una forma de hacerlo
perdurar,
porque dándole un nombre
lo hacemos crecer
y ampliar su caudal...
Qué sería del poeta
si no pudiera engarzar
los eslabones en este
encuentro,
qué sería del poeta
si para cada sentimiento
no pudiera encontrar
la palabra cargada
con la emoción exacta.
Encuentro vital,primordial
el de la palabra
con el sentimiento...
Y así la poesía
y así los versos
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
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