Necesito una noche de amor...
soñar viviendo tus caricias,
despertar lentamente
entre suspiros la pasión,
y abandonar nuestras almas
a la deriva del amor...
Necesito una noche entera
para despegar del lecho,
volando de éxtasis contigo
hacia mundos perdidos...
Necesito una noche única
esculpida tramo a tramo,
de tu piel y mis manos,
de tu luz y mis ganas,
necesito una noche
para construirnos
desde adentro
con puros sentimientos.
Los dos vendados y
con los ojos cerrados,
no ver nada más
que nuestras almas,
y palparlas suavemente
y sentir nítidamente
como se juntan
como se alzan
hacia los cielos de los enamorados
guiadas por sublimes coros dorados
coros que cantan desde el corazón...
Esperaré con la ansiedad acunada
entre mis brazos, tranquila , sosegada...
eternizaré mi vida en esa espera
que tarde o temprano llegará...
No caeré en insomnios,
ni en la desesperación,
aguardaré el momento
en que ya no será una necesidad
sino cierto,
que llegó para disfrutar,
ese momento que enuncia mi deseo;
este que mi corazón emite sin rodeos...
Escúchalo, pues tan sólo necesito
una noche de amor...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman.
soñar viviendo tus caricias,
despertar lentamente
entre suspiros la pasión,
y abandonar nuestras almas
a la deriva del amor...
Necesito una noche entera
para despegar del lecho,
volando de éxtasis contigo
hacia mundos perdidos...
Necesito una noche única
esculpida tramo a tramo,
de tu piel y mis manos,
de tu luz y mis ganas,
necesito una noche
para construirnos
desde adentro
con puros sentimientos.
Los dos vendados y
con los ojos cerrados,
no ver nada más
que nuestras almas,
y palparlas suavemente
y sentir nítidamente
como se juntan
como se alzan
hacia los cielos de los enamorados
guiadas por sublimes coros dorados
coros que cantan desde el corazón...
Esperaré con la ansiedad acunada
entre mis brazos, tranquila , sosegada...
eternizaré mi vida en esa espera
que tarde o temprano llegará...
No caeré en insomnios,
ni en la desesperación,
aguardaré el momento
en que ya no será una necesidad
sino cierto,
que llegó para disfrutar,
ese momento que enuncia mi deseo;
este que mi corazón emite sin rodeos...
Escúchalo, pues tan sólo necesito
una noche de amor...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman.